No hay cosa que tanto encienda la caridad y la conserve como el saber cada uno que el otro siente y habla bien de él (33). Séneca, tan convencido estaba de esta verdad, que decía: Si vis amari, ama: «Si quieres ser amado, ama». Y, a la verdad, no hay medio más eficaz para hacerse amar que amar antes, porque el amor no se puede pagar sino con otro amor.
Carta ascética… al presidente de uno de los coros de la Academia de San Miguel. Barcelona 1862, p. 14